La conducción eficiente puede ahorrarte dinero en combustible, mejorar la seguridad vial y prevenir el desgaste de tu coche tanto si eres un conductor particular, como si eres un profesional autónomo que emplea su vehículo con mayor asiduidad. El servicio de renting de Mimowi además, te ayudará a evitar gastos innecesarios y evitar sorpresas en tu factura.
Si sigues estos consejos muy sencillos de conducción, puedes reducir el consumo de combustible y las emisiones de dióxido de carbono de tu coche hasta en un 25%.
Evita las altas velocidades
¡Mantén el límite de velocidad y ahorra combustible! La mayoría de los coches, camionetas o furgonetas son más eficientes en zonas con una velocidad máxima entre 50 y 80 km por hora. Por encima de esta zona de velocidad, los vehículos consumen más combustible cuanto más rápido van.
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Por ejemplo, a 120 km por hora, un vehículo utiliza aproximadamente un 20% más de combustible que a 100 km por hora. En un viaje de 25 km, este aumento en la velocidad y el consumo de combustible reduciría el tiempo de viaje en solo dos minutos.
Acelera suavemente
Cuanto más aceleras, más combustible consumes. En ciudad, puedes usar menos combustible presionando suavemente el pedal del acelerador. Para reducir al máximo el consumo de combustible, tómate 5 segundos para acelerar tu coche hasta 20 kilómetros por hora desde una parada. Imagínate que hay una taza de café en el salpicadero, ¡no la puedes derramar!
Anticípate
Mira hacia adelante mientras conduces para ver lo que se avecina y mantén una distancia amplia entre tu coche y el que está delante de ti. Al observar de cerca lo que hacen los peatones y otros automóviles e imaginar lo que harán a continuación, puedes mantener la velocidad lo más estable posible y usar menos combustible. También es más seguro conducir así.
Usa el freno motor
En las deceleraciones, levanta el pie del acelerador y deja rodar el coche con la marcha engranada. Ahorrarás combustible y dinero si quitas el pie del acelerador y se desplaza por inercia para reducir la velocidad en lugar de usar los frenos. El motor actuará como freno y el consumo será cero.
Conducción en pendientes
Pequeñas variaciones en la velocidad pueden ser buenas cuando la gravedad ayuda. En las subidas, es conveniente retrasar la reducción de marchas y acelerar ligeramente. Durante las bajadas es más eficiente circular en marchas largas y rodar por inercia.
No pises los frenos
A veces, para evitar un accidente, no hay otra opción. Pero en situaciones normales de conducción, ir en punto muerto hacia una señal de STOP o un semáforo en rojo te ayuda a ahorrar combustible y dinero. No es solo un hábito de conducción que ahorra combustible, también es bueno para los neumáticos y frenos, puesto que ahorrarás en costes de mantenimiento y reparación.
No abuses del climatizador
Para una conducción eficiente, es recomendable no usar el aire acondicionado si la temperatura es ya agradable de por sí, puesto que el sistema de calefacción repercute en el consumo de tu coche.
Tampoco es recomendable bajar las ventanas del coche para disfrutar del clima, sobre todo a grandes velocidades, pues merma la aerodinámica.
Detener el coche
Cuando te detengas, cuando la velocidad y el espacio lo permitan, es mejor detener el coche sin reducir previamente de marcha. En paradas prolongadas (más de 60 segundos) es recomendable apagar el motor.
Conducción eficiente con motores diesel
A diferencia de los motores de gasolina, si el motor de tu vehículo es diesel, es conveniente esperar unos segundos tras el arranque antes de ponerte en marcha.
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